jueves, 21 de septiembre de 2017

¿Tristeza?...Claro que sí!

Cuántas veces he sentido mi vida sola y triste,
y cuántas veces he deseado poder estar acompañada.    

Tonta; entonces no entendí que cuando más sola estaba y más vacía me sentía, cuando la gente me decía "no apresures tu vuelo, cuida tu corazón", tenían gran razón y sólo pretendían librarme de las penurias y de esa gran desazón que que queda en el alma tras una desilusión.

Triste ahora, entiendo que ese amor profeso, no era amor de verdad.

Y triste ahora comprendo que cuando triste me sentía, aquellos días deseando estar acompañada, no era tristeza real, era una tristeza aprendida en todas aquellas novelas, en las que aparecía un príncipe de verdad.

Triste, ahora te miro niña de veinte años, niña de treinta y niña de cuarenta y triste te digo:

No es tristeza lo que sientes cuando te sientes sola.

Tristeza es lo que se siente cuando estando acompañada permanece un vacío que nadie puede llenar.

Tristeza es lo que se siente cuando después de darlo todo te dicen al oído ya no te quiero más.

Tristeza es lo que se siente cuando un día estás contenta y viene alguien y te dice te mereces soledad.

Tristeza es no entender por qué te arrancan el alma a trozos entre sonrisas y miradas tiernas.

Tristeza es creer que amas profundamente, cuando en realidad sólo buscas que te amen de verdad.

Tristeza es mirarte al espejo y sólo ver un reflejo de la mirada del otro.

Tristeza es vivir esperando que algo cambie sabiendo que vivirás sólo deseando toda una eternidad.

Tristeza es reconocer que estás triste y aún así querer quedarte porque te resulta conocido y porque crees que te lo has buscado y que algún día la situación cambiará.

Tristeza es decidir aún contra tu propia voluntad terminar de arrancarte el alma a trozos porque en la tuya llevas la suya y te has cansado ya.

Tristeza es quedarte vacía, sin alma, si él, sin tí, porque tú lo decidiste así. Porque te creíste el cuento del hombre perfecto para tí.
Y no supiste mirar y valorar tu perfecta soledad, aquella con la que aunque te sintieras triste, estabas completa de verdad.

Por eso, triste te digo, niña de veinte, de treinta y de cuarenta:
Ámate antes de amar,
valora tu soledad.
Sólo así sabrás cuánto puedes dar,
sólo así sabrás cuándo parar de obsequiar tu talento;
sólo amándote podrás gritarle al viento:
Me gusta mi soledad!
Y si buscas compañía que sea por bondad
 y generosidad.

Y triste,  me despido ya.

:(

Siempre hay momentos para todo. Piensa en lo triste que pude estar al escribir esto. La verdad es que lo estaba.

Desde pequeña aprendí que mostrar mis emociones era signo de debilidad, si las mostraba me exponía al poder de los demás. A que se burlaran, a que me llamaran tonta y débil. Si dejaba que vieran lo que sentía, simplemente me mostraba vulnerable. Y no quería ser vulnerable, porque siéndolo ya me habían hecho mucho daño.
No te imaginas lo liberador que es "SENTIR". No para quedarte encerrado en ese momento, sino porque es lo que toca.
A muchos nos enseñaron que llorar es de débiles, o lo aprendimos por ejemplos vistos. Si alguien lloraba a escondidas, era por algo, suponías. Lo que se esconde se supone que es algo que no se quiere mostrar... Etc.

Date el placer de llorar cuando corresponda hacerlo. Cuando te enfrentas a esos sentimientos que los han llamado equivocadamente "negativos",  terminas aceptándolos. Y es lo único que tienes que hacer. Llora, si te apetece, llora, llora desde lo más profundo de tu alma. Cuando lo hayas hecho, terminarás sintiéndote libre. Respecto a tiempo que te puedes permitir llorar,  eso ya es cuestión de cada uno. La tristeza sólo es eso, tristeza.
Entonces podrás disfrutar del resto de la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Es posible ser tu mejor versión

"CADA SER ES UNA ESENCIA DISTINTA".

Espero que a través de este blog, alguien pueda vivir unos instantes de introspección conmigo.

"Eres único/a, un reflejo de Dios en este mundo, comparte todo lo que tengas, recibirás con creces; ama, no dejes de amar; aunque sientas que no te aman; vive intensamente, crece libre, siente paz; la vida es hermosa aun con sus perplejidades.

Tampoco olvides: En cualquier situación siempre serás importante para alguien".



Pensamientos

Datos personales